La astaxantina es un carotenoide que posee aplicaciones significativas en las industrias nutracéutica, cosmética, alimentaria y de piensos. Su principal fuente natural es el alga Haematococcus pluvialis, que acumula niveles significativos de astaxantina y es cultivada a gran escala actualmente. Reconocida por su fuerte actividad antioxidante y propiedades colorantes, la astaxantina muestra potencial en la prevención de diversas condiciones de salud.
Investigaciones respaldan la idea de que la ingesta diaria de astaxantina puede ser una estrategia práctica y beneficiosa para proteger los tejidos corporales contra el daño oxidativo. Además, se destaca su presencia en animales acuáticos, mariscos y aves, con funciones biológicas esenciales que incluyen protección contra la oxidación de ácidos grasos, defensa ante la luz ultravioleta, respuesta inmune, pigmentación y mejoras en la reproducción.
El cuerpo produce radicales libres y formas reactivas de oxígeno durante procesos metabólicos normales, pero factores como el estrés fisiológico, la contaminación y la exposición a la luz ultravioleta pueden aumentar su producción. Estos radicales libres pueden causar daño al ADN, proteínas y membranas lipídicas, vinculándose a problemas como envejecimiento, aterogénesis y otras enfermedades.
Astaxantina como antioxidante
La astaxantina se destaca por proteger los fosfolípidos membranosos y otros lípidos contra la peroxidación. Su actividad antioxidante ha demostrado ser varias veces más fuerte que la vitamina E y el beta-caroteno en diversos estudios.
Además de combatir el estrés oxidativo, también desempeña un papel clave en la protección contra la fotooxidación por luz ultravioleta, la reducción de la inflamación, la prevención del cáncer, la resistencia a infecciones como Helicobacter pylori, y la promoción de la respuesta inmune. También, se ha asociado con beneficios para la salud en órganos y sistemas como el corazón, los ojos, las articulaciones, la próstata y la función hepática.
Salud ocular
En este ámbito, la astaxantina destaca por su potencial para abordar dos importantes causas de discapacidad visual y ceguera: la degeneración macular relacionada con la edad (DMAE) y las cataratas relacionadas con la edad. Estas enfermedades están vinculadas a procesos oxidativos inducidos por la luz dentro del ojo. Estudios en animales demostraron que la astaxantina es capaz de cruzar la barrera hematoencefálica y para depositarse en la retina de los mamíferos.
Por otro lado, estudios epidemiológicos respaldan la asociación entre una ingesta dietética elevada de carotenoides, incluyendo luteína y zeaxantina, y un menor riesgo de cataratas nucleares y DMAE.
Salud de la piel
La exposición excesiva a la luz solar sin protección puede causar quemaduras, oxidación fotoinducida, inflamación, inmunosupresión, envejecimiento y carcinogénesis de las células cutáneas. Estudios preclínicos sugieren que la astaxantina puede reducir este daño, siendo especialmente efectiva contra la fotooxidación de la luz ultravioleta. Se ha demostrado que reduce la oxidación fotoinducida, inflamación y envejecimiento de las células cutáneas. Estudios preclínicos sugieren que la astaxantina actúa como un potente protector solar oral, superando a otros antioxidantes como el beta-caroteno y la luteína.
Daño oxidativo e inflamación
En mujeres jóvenes y saludables, la astaxantina en la dieta impulsó respuestas inmunitarias humorales y celulares, mejorando la proliferación de linfocitos, actividad citotóxica de células NK y la producción de IFN-g e IL-6.
La astaxantina revela su potencial al reducir el daño al ADN y la inflamación, indicado por la disminución del biomarcador de daño al ADN y la concentración de proteína C reactiva en plasma. Además, se observa una mejora notoria en la respuesta inmune, evidenciada por el aumento de linfoproliferación, actividad citotóxica de las células asesinas naturales y una respuesta tuberculina más robusta.
Aunque las concentraciones plasmáticas pueden variar según la fuente y la duración de la administración, incluso dosis moderadas de astaxantina natural muestran beneficios para la salud. Desde el fortalecimiento de respuestas inmunitarias hasta la reducción del daño oxidativo y la inflamación, la astaxantina destaca como un poderoso aliado en la promoción de la salud integral.
Estos resultados respaldan la noción de que la astaxantina no solo es un antioxidante eficaz, sino también un modulador inmunológico valioso. Al incorporar este potente carotenoide en la dieta, se puede promover una salud óptima, ofreciendo beneficios tangibles para la vitalidad y el bienestar general.
Referencias:
- Park, J.S., Chyun, J., Kim, Y., Line, L.L., & Chew, B.P. (2010). Astaxanthin decreased oxidative stress and inflammation and enhanced immune response in humans. Nutrition & Metabolism, 7, 18 – 18. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/20205737/
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- Sztretye M, Dienes B, Gönczi M, Czirják T, Csernoch L, Dux L, Szentesi P, Keller-Pintér A.(2019) Astaxanthin: A Potential Mitochondrial-Targeted Antioxidant Treatment in Diseases and with Aging. Oxid Med Cell Longev. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6878783/
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